Es en el latín donde encontramos el origen de la palabra deporte: “Depotare” que bien puede traducirse como “Deportar” (salir, expulsar, retirar). No se confundan ya que dicha palabra fue utilizada por los romanos para darle un significado a las actividades que realizaban al aire libre. La finalidad era tener una distracción de sus tareas cotidianas y mantener así un equilibrio físico y mental.
Con diferentes hallazgos arqueológicos se cree que en el año 4 mil a.C. ya se practicaba el deporte en diferentes comunidades como China, en el antiguo Egipto y la antigua Persia. Pero fueron los griegos quienes en el año 776 a.C. realizaron los primeros juegos olímpicos con tan sólo seis competiciones. Más tarde le permitirían a la humanidad tener competiciones a nivel profesional.
En la actualidad
Actualmente las actividades deportivas se suman en 28 disciplinas que fueron las requeridas para los Juegos Olímpicos en Rio de Janeiro 2016. Donde 306 atletas asistieron para subirse al podio y ser reconocidos como los mejores del mundo. Pero de qué le sirve a un deportista ser el número uno, jactar fortunas millonarias y tener fama mundial si no es capaz de respetar a sus iguales y las reglas básicas de una convivencia socialmente sana.
Y es que nos resulta fácil pensar que los deportistas viven inmensamente felices por aquello de la dopamina y los temas químicos del cuerpo. Sin embargo, muchas historia resultan ser todo lo contrario, prueba de ello son los siguientes personajes que parecen tan normales y resultaron ser bastante peculiares.
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Mike Tayson “el come orejas”
Corría el año de 1995 cuando el boxeador estadounidense regresaba al ring después de haber pasado 6 años en prisión acusado de violar a una joven modelo de 18 años. En 1996 se coronaba nuevamente campeón de los pesos pesados y meses más tarde perdería el título ante su oponente Holyfield. Fue en 1997 durante la revancha que Tayson le arrancaría un pedazo de la oreja derecha a Holyefield como signo de desesperación o tal vez de venganza, acto que le costo 12 meses de suspensión. Para el año 2003 el boxeador se declaraba en bancarrota con múltiples deudas millonarias por demandas y obligaciones fiscales incumplidas.
Luis Suárez y la odaxelgania
Manifestación de placer que causa el morder o ser mordido por otra persona. Al parecer hemos descubierto el problema de Luis Suárez, el único detalle aquí es que nadie le explico que sus fetiches los debe alejar de las canchas. Pero recordemos sus épicas mordidas: En 2010 mientras Suárez se desempeñaba en el Ajax se le lanzo a mordidas a Otman Bakkal, en 2013 hizo lo respectivo contra Branislav Ivanovic y en el Mundial de Brasil 2014 agredió a Giorgio Chiellini. Por supuesto todos sus desafortunados accidentes fueron castigados con varios meses lejos de las canchas.
Cuauhtémoc Blanco el ídolo bipolar
El tepiteño se caracterizo siempre por ser un hombre de pocas pulgas y de léxico limitado, sin embargo, cuando de fútbol se trataba era todo un genio para liderear al equipo de sus amores, las águilas del américa.
Durante el encuentro entre el América y el Sao Caetano correspondiente a la Copa libertadores del año 2004 Blanco fue el principal causante de un zafarrancho épico que involucro a jugadores, cuerpo técnico y hasta aficionados que no soportaron la descalificación del torneo sudamericano. Y que al delantero le constaría la suspensión de un año en toda competición de CONMEBOL, incluso se habla de que aquel incidente le costó su salida de Coapa.
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Giovani Dos Santos, ¿Un bien para el América?
Al hablar del “Temo” no podemos dejar de mencionar aquel cobarde ataque hacia el periodista deportivo David Faitelson quien realizando su trabajo fue victima de un puñetazo por parte del delantero mexicano quien no dio la cara y negó siempre lo sucedido. Sin embargo pareciera que su impulsos agresivos desaparecieron y hoy se convirtió en un señor recto y correcto capaz de Gobernar el Estado de Morelos.
Nick Kyrgios, él quiere ser protagonista a como de lugar
Cerremos nuestro recuento con los más recientes y polémicos ataques sucedidos hace unos días en Wimbledon donde el tenista autraliano Kyrgios es le protagonista tal y como a él le gusta. El primero sucedió mientras enfrentaba a su par y compatriota Jordan Thompson y el segundo contra Rafael Nadal al lanzarle un pelotazo directo al cuerpo que afortunadamente no tuvo mayor repercusión. Por ambas actitudes antideportivas Kyrgios pagara únicamente 8 mil dólares como si esto fuera suficiente para sancionar la poca tolerancia a la frustración que sufre el hombre.
Y así podemos continuar mencionando personalidades deportivas que pasan de ser reconocidos por su talento a ser conocidos por sus penosos problemas mentales.
